El brote de sarampión en México ha alcanzado una cifra alarmante de mil tres casos confirmados y cuatro muertes, según reportes oficiales. Las autoridades sanitarias han intensificado las campañas de vacunación para contener la propagación del virus.
Las cuatro muertes registradas incluyen a dos niños de la comunidad menonita en Chihuahua que no estaban vacunados y presentaban condiciones médicas preexistentes.
Uno de ellos, de siete años, padecía leucemia, y el otro, de 11 meses, tenía una afección renal. La tercera víctima fue un adulto con diabetes y problemas renales. Y la cuarta, fue una niña de un año, hija de jornaleros agrícolas migrantes, que sufría desnutrición severa y tampoco estaba vacunada.
El estado de Chihuahua concentra la mayoría de los casos, con más de 347 infecciones confirmadas. Otros estados como Sonora, Oaxaca, Campeche y Tamaulipas también han reportado casos. El grupo más afectado son los niños de 0 a 4 años, con 355 casos.
Ante la situación, la Secretaría de Salud ha implementado un cerco vacunal en las zonas afectadas para atender el brote de sarampión en México. Aplicando dosis de la vacuna triple viral (sarampión, rubéola y parotiditis) a contactos de personas contagiadas y a profesionales de la salud.
Además, se ha llevado a cabo la Semana Nacional de Vacunación del 26 de abril al 3 de mayo, con el objetivo de inmunizar a 1.8 millones de niños de entre 1 y 9 años de edad.
¿Por qué es importante la vacunación?
El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa y prevenible mediante vacunación. La Organización Panamericana de la Salud ha señalado que la vacunación contra el sarampión ha evitado 60 millones de muertes en el mundo entre 2000 y 2023
Las autoridades sanitarias hacen un llamado a la población para verificar y completar sus esquemas de vacunación, especialmente en niños mayores de un año y adultos menores de 40 años que no estén seguros de haber recibido ambas dosis o nunca contrajeron sarampión.
La rápida pro.pagación del virus en áreas con bajas tasas de vacunación refuerza la necesidad de mantener una alta cobertura inmunológica en la población para prevenir nuevos brotes.