El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, confirmó que cárteles mexicanos como el Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el de Sinaloa, reclutan a colombianos con formación militar.
Esto, tras la muerte de ocho elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en un atentado con explosivos en la comunidad de El Santuario, en el municipio de Los Reyes, Michoacán.
El vehículo en el que viajaban los soldados, activó una narcomina artesanal mientras realizaban patrullajes de seguridad.
El ataque fue atribuido a una célula criminal vinculada al Cártel de Los Reyes, una organización local con nexos con los Cárteles Unidos.
Tras el ataque, las autoridades detuvieron a 17 presuntos delincuentes; 12 de ellos colombianos. Incluyendo a nueve exmilitares y tres civiles con entrenamiento táctico. Quienes ingresaron al país de forma legal, a través del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
CJNG y Sinaloa reclutan colombianos con experiencia militar: SSPC
En la conferencia matutina, el titular de la SSPC, Omar García Harfuch, confirmó que los detenidos “están directamente relacionados con el asesinato de los ocho militares”.
Asimismo, García Harfuch indicó que los colombianos capturados poseen formación militar, y fueron reclutados por cárteles mexicanos. Principalmente por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa.
Hay un patrón confirmado de reclutamiento de exmilitares colombianos por parte de grupos criminales en México”
Los detenidos estaban en posesión de armamento, equipo táctico, explosivos caseros, vehículos y uniformes militares apócrifos. Entre lo asegurado, destacaron más de 40 artefactos explosivos y cientos de cartuchos útiles, lo que demuestra el nivel de preparación de la célula criminal.
Seguridad en Michoacán: un reto para el Gobierno federal
Este ataque en Los Reyes se suma a otros hechos violentos recientes en Michoacán y pone en evidencia la capacidad del crimen organizado para usar tácticas militares y explosivos improvisados contra las fuerzas federales.
La respuesta del Gobierno de México incluye operativos coordinados entre Sedena, Guardia Nacional, Marina y Fiscalía General de la República.
Así como la cooperación internacional con autoridades de Colombia para frenar el flujo de exmilitares hacia redes criminales mexicanas.
